El hecho ocurrió en México. La víctima del ataque, un conocido comerciante de Guanajuato, exponía un problema con los baches de la ciudad.
Guadalupe "N" interrumpió por un momento la venta de helados para iniciar una transmisión en vivo en las redes sociales. Su objetivo, una vez más, era reclamar a las autoridades por la formación de baches en Urireo, una pequeña comunidad ubicada en el corazón de México.
Lo que menos pensó el hombre, que compartía la situación a través de Facebook con los habitantes de Salvatierra, en Guanajuato, fue que momentos después dos hombres pasarían en moto por el camino repleto de pozos donde se encontraba y le dispararían a quemarropa, provocándole serias heridas.
Días antes, en una serie de publicaciones realizadas en redes sociales, el comerciante había pedido ayuda a los habitantes de Urireo para "reparar los baches de la carretera".
"Ya estamos abriendo la lista, por si gustan aportar su granito. Vamos a ver cuánto se alcanza a juntar de aquí a mediados de la semana que entra. Espero que no me defrauden ya, mínimo pueden ayudar a compartir por si salen más personas interesadas en apoyar", escribió en el perfil de su marca.
Para finalizar el mensaje, eligió una frase en clave de cuestionamiento hacia las autoridades: "Demostremos con hechos lo que siempre estamos diciendo que Urireo es grande y que puede ser independiente".
Previamente, en otra transmisión en vivo, había reconocido que había mantenido una discusión con una persona acerca del estado de la ruta y que le exigía respuestas al Gobierno porque pagaba "muchos impuestos" para que esté en mejores condiciones.
"Mucha gente me pidió que nos juntáramos para darle mantenimiento nosotros mismos a la carretera, yo no hubiera querido meterme en esto porque esto es un relajo y se echa unos enemigos sin tener nada que ver, uno lo hace de voluntad, de tanto y tanto ya me convencieron", dijo el comerciante en el inicio del video que refleja el momento del ataque.
La cámara, ubicada a un costado de la ruta, en un sector dominado por notorios charcos de agua en la tierra lindera al asfalto, permanecía quieta. El hombre continuaba hablando cuando se acercó una moto roja con dos hombres a bordo.
Al llegar cerca de él, uno de los tripulantes del vehículo, el que viajaba como acompañante, sacó un arma, apuntó y le disparó al menos en seis ocasiones.
El hombre cayó al piso y comenzó a quejarse, pero no dejó de transmitir en ningún momento. Instantes después se escucharon más disparos, mientras algunos usuarios preguntaban qué estaba ocurriendo y otros ya iniciaban sus oraciones pidiendo por su salud.
Segundos más tarde, el comerciante pudo llamar a su pareja con el fin de despedirse. "Te amo, ya me mataron", alcanzó a decirle, ya malherido.
"Te amo, cuida a mis hijos, corazón. Se me está yendo el aliento. Edúcalos, me estoy muriendo, estoy tirado en el campo. Te amo, te amo corazón, dile a mis hijos que los amo. Vengan rápido, me balearon", le comenta a la mujer.
Quienes continuaban mirando la transmisión pedían por favor que lo ayuden y lo lleven a un hospital. "No puede ser diosito. Por qué el, si está ayudando al pueblo", comentó una señora.
En uno de los videos, el vendedor de helados les preguntó a los vecinos que se acercaron a ayudarlo rápidamente dónde había sido impactado por las balas.
"Voltéame para ver, los traigo en la espalda; que el video quede como un legado de que el pinche gobierno es una basura", dijo la víctima del ataque, ya con dificultad para respirar.
Momentos más tarde, llegó al lugar su esposa. "Mi amor, mi amor, yo te voy a salvar, súbanlo a la camioneta, por favor, yo lo llevo al hospital", gritaba la mujer.
Según medios locales, el Gobierno Municipal de Salvatierra confirmó que el hombre recibió tres impactos de bala, uno en la pierna, otro en la ingle y uno más en el glúteo, y que se encontraba fuera de peligro.
Los atacantes, que huyeron rápidamente del lugar, al menos hasta la noche de este martes no habían sido identificados.
El Gobierno de Salvatierra condenó "enérgicamente el hecho delictivo" y manifestó que "este acto violento atenta contra la tranquilidad de las comunidades y exige respuesta firme de las autoridades competentes".