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El 'mosquito del metro de Londres' podrí­a tener un origen mucho más antiguo, según nuevo estudio

El mito tuvo su origen en medio de la Segunda Guerra Mundial, cuando los londinenses que se refugiaban de los aviones de guerra alemanes en las estaciones de metro tuvieron que soportar las picaduras de mosquitos.

Viernes, 24 de Octubre de 2025
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El mito tuvo su origen en medio de la Segunda Guerra Mundial, cuando los londinenses que se refugiaban de los aviones de guerra alemanes en las estaciones de metro tuvieron que soportar las picaduras de mosquitos.

El mosquito en cuestión se conoce comúnmente como mosquito doméstico del norte y existe en dos formas, idénticas en apariencia pero con diferente comportamiento. Una se llama Culex pipiens form pipiens, que solo pica a las aves y vive al aire libre, y la otra se llama Culex pipiens form molestus (del latí­n «molesto»), que pica a los humanos y prospera bajo tierra.

Algunos biólogos creí­an que esta última variante podrí­a haberse adaptado para prosperar en las estaciones de metro de Londres.

"Esa teorí­a se popularizó gracias a un estudio genético publicado en 1999, que afirmaba, basándose en lo que yo dirí­a que eran pruebas limitadas, que el mosquito del metro de Londres parecí­a haber evolucionado (in situ) a partir de una población superficial", declaró Yuki Haba, investigador postdoctoral de la Universidad de Columbia y primer autor del nuevo estudio publicado el jueves en la revista Science.

En el estudio, Haba y sus colegas analizaron las secuencias de ADN de cientos de mosquitos de todo el mundo, incluidas algunas muestras históricas que estaban vivas durante la Segunda Guerra Mundial, y concluyeron que el molestus no evolucionó rápidamente bajo la superficie de la capital inglesa, sino que tiene una historia mucho más larga.

"Es mucho más antiguo que el metro de Londres y parece haber evolucionado alrededor de la región mediterránea, particularmente en la región de Oriente Medio", dijo Haba, añadiendo que la división entre el pipiens sobre la superficie y el molestus subterráneo podrí­a haber ocurrido hace tan temprano como 10.000 años, y tan tarde como 1.000 años, pero lo más probable es que haya ocurrido entre 3.000 y 2.000 años atrás".

"??El análisis evolutivo sugiere que esas poblaciones ancestrales de molestus viví­an sobre la superficie"?, añadió, "??y se dispersaron gradualmente a otros lugares del mundo, incluido el metro de Londres"?.

El origen del "mosquito de Londres": Migrando hacia el norte

La búsqueda del equipo para probar rigurosamente la hipótesis del "mosquito del metro de Londres" comenzó en 2018. "Literalmente buscamos en Google Culex pipiens y enviamos un correo electrónico a todos los autores de todos los artí­culos que encontramos sobre el mosquito, diciéndoles que necesitábamos muestras para comprender el origen y la diversidad genética de la especie", explicó Haba.

Tras miles de correos electrónicos, y unos años después, los investigadores habí­an recolectado mosquitos muertos "??conservados en etanol"?? de más de 200 fuentes en 50 paí­ses. No pudieron obtener ninguno vivo del propio metro de Londres, ya que se les negó el permiso para recolectar insectos directamente. En su lugar, utilizaron muestras históricas recolectadas a lo largo del siglo XX, conservadas en el Museo de Historia Natural de Londres y analizadas por el Instituto Wellcome Sanger, un centro de investigación genómica.

En total, los investigadores analizaron 357 mosquitos contemporáneos y 22 especí­menes históricos, y utilizaron muestras de mosquitos adicionales de un estudio separado, lo que aumentó el recuento general a alrededor de 800.

"??Nuestros datos muestran que el molusco desciende directamente de las poblaciones de pipiens que aún prosperan en la región mediterránea"?, afirmó Lindy McBride, autora principal del estudio y profesora asociada de genómica evolutiva y neurociencia en la Universidad de Princeton. Este hallazgo sugiere que "??evolucionó en latitudes mediterráneas, pero probablemente en Oriente Medio, donde el clima es demasiado árido para que exista la variante que pica aves"?.

Aproximadamente en esa época, la gente de la zona estaba empezando a crear comunidades agrí­colas que utilizaban sistemas de irrigación, lo que proporcionaba lugares ideales para que el mosquito se reprodujera y le permitiera colonizar estas áreas áridas y luego adaptarse a los humanos, dijo McBride.

Los hallazgos se corroboran por el hecho de que el molusco fue descrito por primera vez como especie en 1775 en Egipto por el naturalista Peter Forsskí¥l. "Probablemente, llevaba allí­ al menos 1000 años antes", afirmó McBride.

"Se documentó posteriormente en el sur de Europa, en dos lugares: Croacia e Italia, en el siglo XIX, y los primeros registros de yacimientos subterráneos del norte de Europa datan de alrededor de 1920".

Estas secuencias de detección sugieren que el molusco molestus viajó al norte y, al encontrarse con climas demasiado frí­os para sobrevivir al aire libre, encontró refugio bajo tierra. "No sobreviven al frí­o invierno, por lo que habrí­an estado confinados al sur de Francia, Italia, Grecia y España", dijo McBride. "No pudieron llegar mucho más al norte hasta que encontraron estructuras subterráneas que ocupar durante el invierno".

Existen más de 3000 especies de mosquitos, que ya han colonizado todos los continentes, excepto la Antártida. Se acaba de encontrar un mosquito por primera vez en Islandia, un paí­s que se creí­a libre de estos insectos debido a su clima frí­o.

Oportunidades de mosquitos

Richard Nichols, profesor de genética en la Universidad Queen Mary de Londres, no participó en la investigación, pero fue uno de los autores del artí­culo de 1999 que popularizó la hipótesis del "mosquito del metro de Londres". Nichols declaró en un correo electrónico que considera el nuevo estudio excelente y convincente, y que, aunque llega a conclusiones diferentes a las de su propia investigación, "así­ es como funciona la ciencia".

El estudio de 1999, continuó diciendo, mostró que los mosquitos subterráneos de Londres eran genéticamente distintos de las poblaciones de la superficie, y tení­an caracterí­sticas distintivas que los ayudaban a vivir bajo tierra, como la capacidad de pasar por el ciclo de vida sin alimentarse de sangre, picaduras indiscriminadas cuando surgí­a la oportunidad y la capacidad de aparearse en espacios confinados y reproducirse durante todo el año.

"??Interpretamos estos resultados como que parte de la población subterránea mencionada se habí­a adaptado al sistema de metro de Londres y se habí­a aislado reproductivamente de él"?, afirmó, reconociendo que los datos del nuevo estudio, provenientes de más lugares y con mayor diversidad genética, revelan nueva información que no estaba disponible en ese momento. "??En aquel entonces, solo podí­amos estudiar fácilmente 20 genes, no genomas completos"?, explicó.

"??Nuestros resultados siguen siendo válidos, pero la interpretación ha cambiado"?.

Cameron Webb, profesor asociado de entomologí­a médica en la Universidad de Sí­dney y NSW Health Pathology en Australia, lo calificó como un estudio fascinante y exhaustivo sobre la evolución de este mosquito de importancia mundial.

"Si bien a menudo se le describe como adaptado especí­ficamente al metro de Londres, es bien sabido que este mosquito está asociado con hábitats subterráneos de todo el mundo", escribió Webb en un correo electrónico, quien no participó en el trabajo, pero ha investigado con mosquitos molestus. El estudio demuestra la base ancestral de la capacidad de este mosquito para explotar el metro de Londres, añadió.

El "mosquito del metro de Londres" pone de relieve la necesidad de comprender mejor la biologí­a de mosquitos menos estudiados para ver cómo pueden aprovechar el cambiante paisaje urbano y generar mayores problemas de plagas y salud pública, concluyó Webb. "A medida que el diseño de nuestras ciudades se adapta al cambio climático, debemos asegurarnos de no crear más oportunidades para los mosquitos".