En tiempos de pandemia y encierro, un nuevo mal azota a Mendoza, pero no es justamente a la salud, sino al bolsillo: los robos por redes sociales. El número de hurtos en los encuentros pactados por alguna de las redes para vender o comprar algo se ha incrementado significatvamente.

Osvaldo Araujo, subcomisario Jefe de la División de Delitos Económicos, habló en Aurora 91.3 sobre los peligros que presentan este tipo de acuerdos: "Estamos teniendo entre 6 y 8 casos de robos por semana". 

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“Una de las estrategias de los delincuentes es colocar un precio bastante tentador, entonces la persona busca la oportunidad. Y en ocasiones se hace la estafa con un cheque robado, y en un fin de semana no pueden comprobar si el cheque es bueno", aseguró el uniformado. 

La red social que da más lugar a este tipo de maniobras el Facebook, y su novedoso botón de "MarketPlace". Sin embargo, aún hay grupos de compra venta, a pesar de que la empresa de Zuckemberg declaró que todos iban a ser eliminados. Con respecto a esto, Araujo comentó:  "Estamos teniendo entre 6 y 8 casos de robos por semana. Y así como hay hechos esclarecidos, donde el dueño reconoce su producto que fue robado, también tenemos hechos donde una persona va a buscar y termina siendo víctima". 

"Las recomendaciones que hacemos es que saber mínimamente con quién vamos a hacer el trato, investigar quién es a través de su perfil, y si es un perfil que tiene coherencia. Porque hay perfiles que los arman con el único fin de vender o comprar; que el producto sea algo lógico el precio; y que el lugar pactado sea un lugar seguro, un lugar de concurrencia pública: una estación de servicio; un centro comercial; e inclusive hemos sugerido que se haga en la puerta de la comisaría", mencionó.  

Uno de los hurtos que más se ha presentado es con la compra o venta de un automotor. Por eso, desde la justicia recomiendan: "Hay que averiguar todo. El registro de la propiedad del automotor te facilita muchísimo la documentación online. Con un pequeño importe le llega al mail el estado de domino y le llegan todos los datos del vehículo. Y después tiene que tener cierta medida de seguridad presente: el grabado de los cristales; que la patente coincida con la documentación; que si la tarjeta verde dice que la patente tiene que ser original, no puede ser duplicada".

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Y, por supuesto, la más antiguas de estas estafas 2.0 sigue vigente: el cuento del tío. "Tiene varios matices, porque el delincuente estafador con las llamadas telefónicas va adaptando el argumento según la situación social que se vive", mencionó el subcomisario, y agregó: "Hay diferentes argumentos para conseguir acceder a datos de la cuenta, ya sea que las personas vayan al cajero, genere la clave propia, y con esa clave token el estafador tiene el acceso total de la cuenta, y con cambiar un dígito se pierde la cuenta". 

“La matríz de la estafa es acceder a los datos de una cuenta. A veces engañan a alguien para que cruce el dinero a una cuenta, de ahí lo cruzan a tres o cuatro cuentas, lo sacan en el día y perdemos el rastro", finalizó. 

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