La Policía de Junín informó el descubrimiento de un cuerpo empalado, y luego descrubieron que esa persona tenía una denuncia de abuso sexual.

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José Fernando Busto Vega, de 54 años, fue encontrado sin vida en una propiedad abandonada de la localidad mendocina de Ingeniero Giagnoni.

El jefe de la fiscalía de San Martín, Oscar Sívori, reveló que “tiene signos de empalamiento”, además de aclarar que “la muerte habría ocurrido hace 72 horas”.

El hallazgo que se dio durante la tarde de este miércoles, fue confirmado por fuentes policiales y del Ministerio Público Fiscal, que arribaron a la escena tras un llamado al 911.

Ni bien llegaron al lugar en cuestión, las pesquisas comprobaron la veracidad de lo denunciado, y comenzaron con las maniobras habituales en la vivienda situada en el Kilómetro 1026 de la Ruta 50, entre Cantalejo e Irrazabal.

Los uniformados detectaron que el cadáver estaba tirado boca abajo, con la parte superior tapado con algunas ropas y con un palo en el interior de la cavidad anal.

Además, los detectives comprobaron que uno de sus brazos fue desprendido y comido por algunos animales de la zona.

El ahora fallecido había sido denunciado por abuso sexual en algunas ocasiones. Una de las primeras presentaciones contra su persona la realizaron el 17 de diciembre de 2020.

Además, tenía otra causa por un hecho de abuso sexual agravado, correspondiente al 19 de octubre de 2016. En este caso terminó imputado.

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