Detuvieron en Mendoza a un podólogo acusado de envenenar y asesinar a su esposo en enero de 2020. Para los investigadores, Germán Berjeli sería el principal acusado de meter sustancias extrañas al suero de su esposo, luego de una insuficiencia renal.

El acusado era buscado desde ese año por la justicia por ser el principal sospechoso de la muerte del chileno Roberto Alfonso Aquiles Guzmán Jaque y fue imputado por homicidio cuádruplemente agravado luego de haber suministrado sustancias extrañas en el suero de su pareja. Una de las hipótesis que se manejan es que Berjeli buscaba quedarse con un importante inmueble a nombre de Guzmán.

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En septiembre de 2019 la pareja contrajo matrimonio y tan solo cuatro meses más tarde, Guzmán, de nacionalidad chilena, fue internado en el Sanatorio Anchorena de Recoleta debido a una insuficiencia renal. El 12 de enero, de manera extraña y repentina, perdió la vida. 

Tras la muerte, la familia de la víctima denunció tener dudas acerca del trágico desenlace, por lo que el juez  Nacional en lo Criminal y Correccional 19, Diego Slupski inició un expediente caratulado como "averiguación de delito".

A partir de allí comenzó una investigación por parte de la División Homicidios de la Policía de la Ciudad, quienes allanaron el domicilio de Berjeli ubicado en el barrio de Villa Crespo y secuestraron bolsas con medicación, recetas médicas a nombre de la víctima, una notebook y un teléfono celular.

Una de las pruebas más contundentes para la investigación, son las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del Sanatorio Anchorena, en las cuales se puede ver como Berjeli manipulaba los sueros de su pareja.

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El análisis de los estudios clínicos de Guzmán, arrojó que había presencia de alcohol etílico en su cuerpo, además de otras sustancias dañinas para su organismo. A partir de esto los investigadores tienen como principal hipótesis, el envenenamiento y la posterior muerte.

La causa fue recalificada como homicidio cuádruplemente agravado por el vínculo, la alevosía, el envenenamiento y la codicia. 

Este último agravante, debido a que los investigadores entienden que el móvil del crimen tenía un fin económico, ya que Berjeli pretendía heredar una propiedad ubicada en Chile a nombre de Guzmán y una importante suma de dinero.

Luego de todas estas investigaciones se ordenó la detención del imputado. Pero al realizar los allanamientos se pudo corroborar que Berjeli había abandonado los domicilios habituales. Tiempo después se supo que el podólogo se encontraba radicado en la ciudad de Mendoza.

Con el aporte de la Policía de Mendoza, se pudo dar con el sospechoso y tras varios días de averiguaciones lograron detenerlo al salir de una vivienda ubicada en calle Alsina al 2400.