Las nevadas en montaña persistirán, y se recomienda precaución al circular, abrigarse bien y proteger cañerías ante la formación de hielo.
Durante la noche del sábado 28 y buena parte del domingo 29 de junio, Mendoza vivió una de las nevadas más intensas de la última década. Según datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se acumularon 8?cm de nieve en la zona del Aeropuerto Internacional Francisco Gabrielli, cifra que superó ampliamente los registros de 2017.
El fenómeno, que comenzó tras el ingreso de una masa de aire polar, se extendió más de 24 horas. En contraste con la nevada del 2017, que interrumpió al mediodía, esta vez la caída fue continua y persistente, teñida de blanco no solo en la cordillera, sino también en zonas del Gran Mendoza, Luján de Cuyo y otras áreas urbanas y rurales.
Miles de vecinos aprovecharon el día para salir al Parque General San Martín, plazas y barrios a retratar el inédito paisaje, mientras muchos compartieron imágenes en redes. Sin embargo, la alegría convivió con la preocupación: rutas con placas de hielo y tráficos complicados motivaron cierres parciales, y se intensificaron los operativos sociales por las dos muertes recientes de personas en situación de calle.
El SMN advierte que este lunes y martes seguirán las temperaturas bajo cero, con mínimas que podrían alcanzar los -5?°C y máximas que apenas rozarán los 3?°C. Las nevadas en montaña persistirán, y se recomienda precaución al circular, abrigarse bien y proteger cañerías ante la formación de hielo.
Esta nevada, histórica para un invierno reciente, marca el inicio de las vacaciones con un escenario sorprendente y desafiante. Tras casi una década sin postal blanca en el llano, Mendoza se convirtió por unos días en una provincia verdaderamente “congelada” que ofrecerá paisajes memorables… y un llamado a la responsabilidad comunitaria.