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Nuevas funciones de "Los mercaderes" en la sala Elina Alba

Luego de su gran estreno con entradas agotadas, vuelve a escena la obra teatral de Arístides Vargas, una versión libre de El mercader de Venecia, de William Shakespeare. Las funciones serán el sábado 30, a las 21, y el domingo 31, a las 20, en la sede de la Subsecretaría de Cultura de la Provincia.


Jueves, 28 de Agosto de 2025

Arístides Vargas -artista mendocino por adopción y de reconocimiento internacional cuyas obras se han traducido a muchos idiomas- vuelve a la tierra que lo vio crecer para llevar a escena esta propuesta de reescritura del clásico del teatro isabelino El mercader de Venecia, de William Shakespeare.

Con un elenco íntegramente local y de gran trayectoria, la obra se caracteriza por su temática aún vigente. Entre bailes, brindis y concursos se juega mucho más que dinero. Una herencia, un concurso y un préstamo con una cláusula mortal. Un club social donde la justicia se disfraza, el poder seduce y el amor se cotiza en dólares.

La entrada tiene un valor general de $ 10.000. Para estudiantes y jubilados se promocionan dos entradas por $ 17.000. Están a la venta en www.entradaweb.com o en la misma sala (Gutiérrez y España, Ciudad) una hora antes de la función.

La obra

Basanio, un joven noble venido a menos, necesita 500.000 dólares para conquistar a la rica y astuta Porcia. Antonio, su inseparable amigo, recurre para eso a Chirlok, un prestamista despreciado, quien impone una cláusula siniestra: si no le pagan a tiempo se cobrará su deuda cortándole a aquél una libra de su carne.

Mientras pretendientes excéntricos compiten por la mano de Porcia, que debe casarse para recibir su herencia, el plazo se agota y el cuchillo se alza. Pero cuando todo parece perdido, dos abogados intrépidos irrumpen en escena con ingenio, coraje y una ley en la punta de la lengua.

El mercader de Venecia -la clásica obra de William Shakespeare escrita en 1600- cobra nueva vida en esta versión libre que propone una lectura contemporánea y en clave de comedia.

Sin embargo, detrás del humor y el artificio late una disyuntiva profundamente ética, tan vigente hoy como en épocas del original: "Nos interesa explorar cómo el universo de esta obra, poblado por prestamistas, deudores y personajes atrapados en el engranaje del dinero, dialoga con nuestro presente, en el que las finanzas se han vuelto el lenguaje dominante y, muchas veces, excluyente", afirma Vargas, autor y director de esta relectura que se atreve a cuestionar con ironía el lugar que la economía ocupa hoy en nuestras vidas.

"Vivimos en un mundo donde la espiritualidad, la diversidad humana y los vínculos parecen haberse reducido a simples transacciones. Es como si la economía se hubiese convertido en una especie de dios contemporáneo que no sólo organiza nuestras decisiones, sino que también nos posee. Ya no usufructuamos de la economía: es la economía la que usufructúa de nosotros", afirma el creador.

La obra transcurre en un universo cerrado, donde todo -hasta lo que suponemos más humano- está supeditado a las reglas del mercado. Comprar o vender: no hay tercera opción. Es una lógica binaria que empobrece ética y socialmente a quienes no forman parte activa de ese sistema: los excluidos, los desposeídos, los que no tienen acceso al juego económico. Y eso, además de injusto, es profundamente trágico.

Manifiesta el propio Vargas: "Le agradezco a Shakespeare por haber sido tan visionario, por poner en palabras, hace siglos, el dilema ético de nuestro presente. Su mirada brutal sobre la economía como motor del mundo resuena hoy con una vigencia estremecedora".

Los mercaderes se presenta como una comedia, sí. Y sus risas se tiñen de reflexión en tiempos donde hablar de dinero parece más importante que hablar de humanidad. No es casualidad que este espectáculo se presente en la sede de la actual Subsecretaría de Cultura de la Provincia, un espacio de gran valor patrimonial en el que hace muchos años funcionara el antiguo Banco Hipotecario.

El edificio, construido en 1929, de estilo neocolonial, con su arquitectura intacta y ecos de transacciones pasadas, se convierte así en la escenografía perfecta y real para contar esta historia de préstamos, intereses y vidas atrapadas en la lógica del capital. La obra no requiere artificios: el espacio mismo es la puesta en escena.

El director

Arístides Vargas nació en Córdoba y vive desde muy niño en Mendoza. Trabajó en algunos de los grupos de teatro locales y estudió teatro en la UNCuyo. En 1975 tuvo que exiliarse debido al golpe de Estado cívico-militar y este hecho marcó su obra dramatúrgica.

Ha dirigido importantes grupos y compañías latinoamericanas, entre las que destacan la Compañía Nacional de Teatro de Costa Rica, el grupo Justo Rufino Garay, de Nicaragua; el grupo Taller del Sótano, de México; la compañía Ire, de Puerto Rico, y otras más. Es fundador de uno de los grupos más prestigiosos de América Latina: Malayerba, de Ecuador, al cual dirige en la actualidad.

Entre otras, es autor de las obras Jardín de pulpos, Pluma, La edad de la ciruela, Donde el viento hace buñuelos y Nuestra Señora de las Nubes. La temática de su dramaturgia gira en torno a la memoria, el desarraigo y la marginalidad. La suya es una escritura poética no carente de humor, pero también con cierta amargura y -pese a esta última- inocencia suficiente para creer que el mundo puede ser cambiado. Asimismo, su escritura tiene la crueldad de negarse esa esperanza y caer, por momentos, en la desesperación total.

El elenco

El elenco se constituyó como tal en 2002. Se trata de un grupo de jóvenes egresados de la Licenciatura en Arte Dramático de la UNCuyo que decidió darle continuidad a lo que fue su Seminario de Producción y Registro con el que finalizaron la carrera. La puesta en escena concretada en ese seminario fue la obra Jardín de pulpos, escrita y dirigida por Vargas y con Charo Francés en la dirección actoral.

Vargas volvía a Mendoza por aquellos años después de un largo exilio en Ecuador y ellos se desarrollaban en el mundo del teatro independiente con esta obra maravillosa. Durante estos más de 20 años, el teatro y el cariño los ha reunido muchas veces, ya sea en conjunto, para reponer Jardín de pulpos o llevar a escena otros textos de Vargas, o compartiendo proyectos en la Vendimia.

"Esta vez nos convoca la necesidad de sostenernos en el hacer teatral y cultural en momentos tan difíciles como los que corren, con una comedia al estilo shakespeariano, con una temática de una actualidad sorprendente, comedia de esas que te dejan pensando ante lo increíble que resulta que la realidad muchas veces supere a la ficción", comentó Nuria Atencio, actriz y asistente de dirección de la propuesta.

Ficha técnica

Actores: Nuria Atencio, Darío Martínez, Federico Castro, Claudia Tauber, Ruth Reinoso, Gustavo Cano, Florencia Ríos y Teodora de Pedro

Texto y dirección: Arístides Vargas

Dirección actoral: Charo Francés

Asistencia de dirección: Nuria Atencio

Producción: Florencia Ríos

Escenografía y utilería: Analía Quiroga

Asistente de realización escenográfica: Marysol Cáceres

Vestuario: Santiago Martín

Operadora de luces: Camila Núñez