Natalia Mercery aprovechó el post vendimia para dejar un fuerte mensaje sobre la controversia que generó su elección y aseguró: "No voy a reclamar respeto a las personas que no saben de que hablo".
Por Daniela Conil
Han pasado cuatro días desde la elección de la Reina Nacional de la vendimia, y las repercusiones siguen, no solamente por la elección en sí, sino también por toda la previa a la fiesta entre las que se encontró, quizás como más destacada, la elección de la representante de Guaymallén.
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Sin foto ni datos, y con solo una frase de representación, los vecinos de la comuna eligieron a Natalia Mercery, una madre de 35 años que decidió cambiar el paradigma de vendimia para siempre.
Ni los más convencionales, ni tampoco los más revolucionarios, vieron en Natalia una "reina", por lo que las críticas hacia su persona no tardaron en llegar, principalmente por su aspecto físico.
Sin embargo, la representante de la comuna de Marcelino Iglesias no solo se fue ganando de a poco los corazones de las personas, sino que demostró que puede ser reina al igual que las demás, principalmente en la noche del Acto Central, donde se presentó con atributos, mostrando una imagen inédita en la historia.
Es por eso que, pasada la vorágine, la joven madre aprovechó las celebraciones del 8M para dejar un extenso y contundente mensaje: "No voy a reclamar respeto a las personas que no saben de que hablo".
En su red social Instagram, escrito junto a un video que relató en orden casi cronológico su paso por Vendimia, Natalia expresó: "Cada ocasión me encontró con una sonrisa. Nada fue fácil, nada fue negativo tampoco. Son instancias de aprendizaje que marcan mi rumbo, mi carácter, mi persona, mi propósito".
"No conozco de derrotas, he aprendido a sacudirme, secar mi rostro y continuar. Lo importante es que jamás estuve, estoy, ni estaré sola. Tengo un Dios que me resguarda, una familia que me acompaña y un propósito que me define", continuó.
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En tanto, destacó que "no voy a procurar conformar o agradar a nadie, si eso implica dejar de ser quien soy. Esta soy yo, mujer con convicciones, con aciertos y quizás más desaciertos, pero yo en mi escencia. Me enorgullece ser quien soy y compartirlo con quienes se dieron la oportunidad de conocerme".
"Mi carrera continua, mi compromiso es genuino, encontrarán en mí una persona que respeta, escucha y comprende. Capaz de ponerse en el lugar del otro, y que en muchas ocasiones moverá cielos y tierra para ser útil ante una necesidad. No voy a reclamar respeto a las personas que no saben de que hablo, muchos menos empatía. Soy feliz por ser libre de pensar, actuar y transmitir lo que creo puede aportar a un bien común. Quien coincida, me alegra y quien no.. también. Si todos pensamos igual nadie piensa", enfatizó.
Finalmente, culminó: "Estoy agradecida de cada momento y de cada persona que conocí, porque me han enriquecido la vida. Salud por las diferencias, salud por el amor, el respeto, la empatía, la solidaridad, entre tantas otras cosas por brindar. Salud por los sueños que se cumplen. Y feliz Vendimia".
Natalia Mercery marcó varios hitos en vendimia, no solamente por la inusual manera en la que fue electa, nunca vista antes en la fiesta máxima de los mendocinos, sino también porque fue la segunda reina madre -luego de María José Di Marco en 2018- y la primera con tres hijos y también dio el puntapié para llevar a uno de sus pequeños a la convivencia real.