Legisladores confirmaron que no devolverán el dinero que cobraron por el "ítem desarraigo". El mismo constaba de un plus de entre $9 mil y $13 mil, equivalentes a las sesiones que tenían que ser presenciales, pero se realizaron de forma virtual o semipresencial en el 2020. Desde el Senado apuntan a un "cajoneo" para que no se devuelva el efectivo.

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Según un informe de la Legislatura, en el 2020 el "ítem desarraigo" alcanzó más de un millón de pesos. El mismo estaba destinado a legisladores que viven a más de 100 kilómetros de la Legislatura.

El desarraigo es una forma de compensación de los gastos de traslado y estadía que se les paga a los legisladores que viven alejados de la Casa de las Leyes y, por la resolución 185/7, supone el 3,5% de las dietas para aquellos que viven a una distancia de entre 100 y 200 kilómetros, y del 5% de los sueldos a aquellos que viven a más de 200 kilómetros.

Durante el transcurso del 2020, solo se realizaron cuatro sesiones presenciales, y el resto fue totalmente virtual, por lo que los legisladores no tuvieron que moverse a Legislatura. En ese caso, el ítem desarraigo no tendría valor.

Quien tomó la palabra fue el senador del FIT Lautaro Jiménez. Presentó el 26 de enero un proyecto para que se devolviera ese dinero, pero según informaron, ese proyecto descansa en un cajón guardado bajo llave.

Diferente fue el caso en cámara de Diputados, donde se pagó en febrero del 2020, y determinaron pagarlo nuevamente de noviembre.

En términos monetarios, la Legislatura terminó pagando $1.011.494 a diputados y senadores.