El ministro de Gobierno, Víctor Ibáñez, se presentó este jueves en la Legislatura provincial con el fin de informar ante las comisiones de Legislación y Asuntos Constitucionales de ambas cámaras los detalles del proyecto de boleta única. 

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Después de la polémica por el cambio institucional que planteó Rodolfo Suarez desde el primer día de gestión, el Frente de Todos, primer partido opositor, se mostró abierto a acompañar la iniciativa. No así desde otros espacios políticos. 

Si bien solo necesita el voto de la mayoría para ser aprobada, desde el oficialismo buscan que sea votada con el consenso de todas las fuerzas políticas. La semana próxima, o la otra con mayor seguridad, sería tratada en el Senado para luego pasar a Diputados.

El debate comenzó este mismo jueves en una reunión conjunta de las comisiones de Legislación y Asuntos Constitucionales de ambas cámaras, y podría ser ley dentro de dos semanas -si tiene el acompañamiento de la mayoría de los legisladores-.

La exposición tuvo lugar en la sala de comisiones del edificio Margarita Malharro de Torres y contó con la presencia de otros funcionarios también. Estaba estipulada para que durara 40 minutos, no obstante, se extendió a más de una hora. 

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Por parte de Cambia Mendoza, están dispuestos a modificaciones sugeridas, como así también algunos aportes que realicen los presentes. Uno de los puntos que se critica de frentes opositores como Vamos Mendocinos! es el hecho de que en el sistema que se aplica en Córdoba, se encuentra que brinda la posibilidad, con hacer una cruz en un casillero, de votar la lista completa, lo cual se asimilaría a la lista sábana que se pretende eliminar. 

En tanto, desde el oficialismo afirman que la gran ventaja se encuentra en que disminuye el costo de la política y mejora la calidad institucional. Sería el Estado quien genere y provea las boletas y se lograría la reducción del gasto electoral, ya que solo se imprimirán un poco más de boletas del total del padrón.

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El nuevo diseño, explicaron desde el oficialismo, busca poner también un fin a la circulación de boletas truchas o adulteradas que siempre termina perjudicando a algunos candidatos.

Otro de los puntos importantes es que, sin importar la estructura partidaria de cada partido, todos los candidatos estarán presentes en la boleta. 

La Boleta Única, de aprobarse, se aplicará tanto en las elecciones generales como en las PASO.