Una mujer embarazada parió de parada en la puerta del Hospital Papa Francisco, en la ciudad de Salta, luego de que no la atendieran en esa institución médica y la beba se quebró la clavícula al caer al piso.

El hecho ocurrió casi en simultáneo con la sanción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos contra Argentina por un caso de violencia obstétrica ocurrido en 1992.

El pasado jueves por la noche, la mujer embarazada llegó al hospital en moto junto a su pareja con fuertes dolores, pero en el lugar no la atendieron porque le dijeron que no había médicos.

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Según quedó registrado en las imágenes que se viralizaron en las redes y en los medios de comunicación, se puede ver a la mujer en el piso, mientras es asistida por enfermeros y médicos. Por detrás se escuchan gritos y reclamos al personal del lugar por haberla atendido a la mujer.

Desde el Hospital Público Materno Infantil de Salta, donde fue derivada la mujer luego de parir, informaron a la prensa local que "la madre y su hija se encuentran bien", aunque la beba tiene fracturada la clavícula producto de haber caído al asfalto.

En tanto, el ministro de Salud de esa provincia, Federico Mangione, dijo que a la beba se le realizaron tomografías y tiene un traumatismo de cráneo, sin embargo dijo que "el estado general es estable".

"Estoy bastante molesto con todo esto, se tomarán las medidas que se deban tomar", advirtió el ministro, quien remarcó la falta de controles necesarios durante los embarazos y señaló que la madre se enteró "de casualidad" el 17 de enero que estaba embarazada, y además confirmó la apertura de un sumario administrativo para determinar las responsabilidades del caso.

El padre de la beba contó a medios locales que tras llegar al hospital y negarle la asistencia, pidió que le mandaran una ambulancia. Al comunicarse con el Centro Operativo, la pareja tampoco recibió la asistencia necesaria y le respondieron que no podían enviar la ambulancia porque debían dirigirse al Centro de Salud de Solidaridad o al Materno Infantil.

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"Íbamos a ir en remís, cuando se acercó una señora que estaba en el lugar y se ofreció a llevarnos en su auto. Cuando bajamos el cordón mi mujer ya no podía caminar y ahí rompió bolsa. Sentí que algo cayó y miré para abajo y el bebé estaba en el piso", relató el hombre.

Por su parte, el gerente del Hospital Papa Francisco, Daniel Mamaní, repudió lo ocurrido y aseguró que no tendría que haber sucedido: "Es una situación lamentable, estamos haciendo todas las investigaciones que corresponden para sancionar a quien corresponda por la no admisión de la paciente. Tenemos el registro de todo lo que pasó".