La institución difundió un video de fin de año con una puesta en escena épica, donde los nuevos cazas F-16 acompañan el trineo navideño.
La Fuerza Aérea Argentina eligió una forma poco convencional para transmitir su saludo por las fiestas y logró, una vez más, instalar el tema en la conversación pública. A través de un video difundido en sus redes sociales, la institución mostró a Papá Noel viajando en su clásico trineo, aunque con un detalle distintivo: escoltado en pleno vuelo por aviones F-16 recientemente incorporados a la flota militar.
La pieza audiovisual, que combina efectos digitales, inteligencia artificial y una estética cinematográfica, fue presentada inicialmente durante un concierto navideño realizado el viernes por la noche en el Edificio Cóndor, sede del Estado Mayor General de la Fuerza Aérea. En ese evento, músicos militares e invitados interpretaron canciones alusivas a las fiestas, en un marco institucional que sirvió como antesala para el mensaje final de cierre de año.
En el video, Papá Noel aparece caracterizado con su tradicional traje rojo, pero adaptado al universo aeronáutico: lleva un handy y solicita autorización para aterrizar, mientras es acompañado por los cazas F-16 adquiridos a Dinamarca. El personaje aprovecha el saludo para felicitar a la "familia aeronáutica" por la incorporación de las nuevas aeronaves, destacando su importancia estratégica y su rol en la defensa del espacio aéreo nacional.
La propuesta fue celebrada por sectores vinculados a la Fuerza Aérea, que valoraron el tono épico del mensaje y la intención de reforzar el orgullo institucional en un año marcado por cambios y desafíos. Sin embargo, la difusión del video también despertó críticas en redes sociales y en distintos espacios de opinión pública.
El contexto no fue un dato menor. La publicación coincidió con un escenario atravesado por ajustes presupuestarios, recortes en áreas sensibles del Estado y un debate abierto sobre las prioridades del gasto público. En ese marco, algunos usuarios cuestionaron la elección de mostrar aviones de combate en un saludo navideño, al considerar que banaliza el uso de armamento y se acerca más a una pieza de propaganda que a un mensaje festivo.
El cierre del video refuerza esa dualidad de lecturas: los F-16 escoltan simbólicamente el trineo de Papá Noel sobre la Ciudad de Buenos Aires, con el Obelisco como imagen central, antes de dar paso a una placa oficial con el mensaje "Felices fiestas". Para algunos, se trata de una muestra de creatividad institucional; para otros, de una postal desentonada en un fin de año atravesado por tensiones económicas y sociales.
Lejos de pasar inadvertido, el saludo de la Fuerza Aérea volvió a poner sobre la mesa el debate sobre los límites entre comunicación oficial, marketing militar y sensibilidad social, confirmando que incluso un mensaje navideño puede convertirse en un hecho político y cultural de alto impacto.