El Gobierno de Javier Milei logró desactivar el conflicto con los controladores aéreos que amenazaba con afectar seriamente los vuelos durante los días previos a las fiestas. Tras el dictado de la conciliación obligatoria por parte de la Secretaría de Trabajo, el paro quedó sin efecto y las operaciones aéreas se desarrollan con normalidad en todo el país. La medida obliga al gremio de la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (Atepsa) a levantar cualquier plan de lucha.

Negociaciones salariales y garantía de servicio esencial

Desde el punto de vista operativo, la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) confirmó que la resolución garantiza la prestación ininterrumpida del servicio. De esta manera, tanto los vuelos de cabotaje como los internacionales se realizan según lo programado originalmente, brindando previsibilidad a miles de pasajeros que viajan por Mendoza y el resto de las provincias en plena temporada alta de verano.

El conflicto entre los controladores y la empresa estatal es estrictamente salarial, ya que los trabajadores reclaman una recomposición de haberes frente a la pérdida del poder adquisitivo. Ante la falta de acuerdo en las paritarias, Atepsa había dispuesto interrupciones intermitentes que afectaban las autorizaciones de despegue en franjas horarias rotativas, aunque siempre manteniendo operativos los aterrizajes y vuelos sanitarios.

El plan de lucha suspendido se extendía originalmente hasta el 29 de diciembre e impactaba en la aviación comercial, ejecutiva y general. Con el nuevo marco legal, el conflicto se retrotrae al estado previo, lo que implica que el gremio debe prestar servicios de manera habitual, mientras que EANA queda inhibida de aplicar sanciones mientras dure el proceso de diálogo supervisado por las autoridades nacionales.

La conciliación abre ahora un período de 15 días hábiles de negociación forzosa. El objetivo es alcanzar un acuerdo salarial definitivo que conforme a las partes sin perjudicar a los usuarios. Este tiempo de "tregua" resulta fundamental para los aeropuertos del país, que en estas fechas registran picos de movimiento por los festejos de Navidad y el recambio de turistas que eligen distintos destinos nacionales.

En un comunicado difundido esta tarde, EANA destacó que la intervención del Gobierno logró restablecer la previsibilidad y brindar tranquilidad a los pasajeros de todo el mundo. En Mendoza, el Aeropuerto El Plumerillo opera bajo condiciones normales, asegurando los traslados en una de las semanas con mayor demanda de pasajes del año.