Una asociación creada a nivel nacional, elevó una solicitud concreta que consta de dos pedidos específicos en el contexto de pandemia de coronavirus. Por un lado, plantean la posibilidad de que retomen sus actividades cuando esté más controlada la situación, incluso antes de que se reanuden las clases en el común de los establecimientos educativos (aunque no hay confirmaciones ni estimación de fechas probables). Y también piden un plan de asistencia económica que sea viable y a la que puedan hacerle frente con sus posibilidades; esto para encarar los gastos que siguen teniendo (alquileres de los inmuebles, sueldos de las maestras y pago de servicios esenciales en estos establecimientos).

Cristina Biescke, es dueña y directora de Duende Fló, jardín maternal que cuida a niños de 45 días a 3 años, con una planta de 38 docentes. Comentó al aire de "Buenos días, Aurora" que: “sabemos que es complicado que nos brinden un apoyo económico, pero nuestra función es esencial para la sociedad, porque los papás dependen de que los jardines estén abiertos. Sin embargo, entiendo que es difícil la apertura, ya que no podríamos asegurar el distanciamiento social, ¿cómo le decimos a un niño de dos años que no lo podemos abrazar o que no puede compartir un juguete con otro niño?”

Debido a que los jardines maternales privados, son considerados una actividad comercial, no están regidos por la Dirección General de Escuelas, por lo que no tienen contención directa como establecimiento educativo, aunque claramente lo son. Frente a esto, Cristina comentó que: “Nuestro ingreso de basa netamente en la cuota por niño. Un buen porcentaje de papás pagó la cuota, lo que me permitió pagar un porcentaje del sueldo de los docentes, pero esto es ahora, que es el primer mes, y esto parece que es para largo.”

Los colegios, universidades y jardines maternales están cerrados desde el 16 de marzo. Sin embargo los gastos corrientes continúan generándose a la espera de ser abonados. Cristina concluyó: “Lo que estamos solicitando es una ayuda económica, no préstamos, ya que no podríamos garantizar la solvencia en el futuro para enfrentarlos, pero una ayuda como exención de algunos impuestos, por ejemplo, sería de gran ayuda”.

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