En una nueva jornada de la NBA, Denver Nuggets alcanzó un victoria sin sobresaltos 114-103 ante los Minnesota Timberwolves, en la primera de sus noches de back-to-back (este viernes se enfrentan a Detroit). 

El triunfo los mantiene un partido por detrás de los Clippers y del tercer puesto del Oeste, aunque parece complicado que vayan a superar a los de Lue, quienes cierran la Fase Regular enfrentando a Oklahoma City y Houston.

Más allá de que Denver controló el encuentro de punta a punta, Minnesota llegó a poner las cosas interesantes en el cierre del tercer período, donde una ráfaga de Anthony Edwards dejó el marcador 82-79 entrando al último cuarto. Sin embargo, los Nuggets endurecieron su defensa en los 12 minutos finales, dejaron a los de Finch en 14 unidades y se encaminaron a un cierre abierto.

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Nikola Jokic fue la figura de unos Nuggets que además de los lesionados, le dieron descanso a Monte Morris y Michael Porter Jr. El serbio terminó con 31 puntos y 14 rebotes, lanzando un 14-21 de cancha. Además hubo 15 puntos de Aaron Gordon y un par de contribuciones poco habituales desde el banco: 15 en 17 minutos para Markus Howard y 14 en 18 para Vlatko Cancar.

Facu Campazzo no estuvo derecho con el tiro, terminando con un 2-8 de cancha y 0-3 en triples, aunque contribuyó con 9 asistencias y 3 rebotes en 33 minutos de acción.

El mejor de los Timberwolves fue Anthony Edwards, quien sigue fortaleciendo su argumento para ganar el ROY: 29 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias, 8-16 de campo, 4-9 en triples, 9-12 en libres. Mucho menos eficaz fue la noche de Karl-Anthony Towns, quien sumó 20 puntos y 11 rebotes pero con un 6-18 de campo.