La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil acusó este lunes al entrenador del seleccionado Sub-20 de AFA por los problemas en los papeles de los cuatro futbolistas acusados de incumplir la normativa federal de migraciones en ese país.
La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) acusó este lunes al entrenador del seleccionado Sub-20 de AFA de falsificar las declaraciones juradas de los cuatro futbolistas del equipo de Lionel Scaloni acusados de incumplir la normativa federal de migraciones en ese país.
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El detalle pasa por el acusado: Fernando Ariel Batista. Según el medio "O Globo", la persona señalada coincide con la identidad del DT del seleccionado Sub-20 y olímpico, quien no estuvo en ningún momento con la delegación que llegó el viernes a Brasil desde Caracas, Venezuela.
Así, el "Bocha" Batista se vio involucrado en el escándalo y tuvo que salir este mediodía a aclarar que no tiene que "nada que ver" con el asunto y que ni siquiera viajó con el plantel del seleccionado mayor que participa de la actual triple fecha de Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial Qatar 2022.
"Me da bronca que salga mi nombre ahí. Estoy en Buenos Aires y no pasé ni por Venezuela ni por Brasil", dijo Batista.
Los documentos publicados en "O Globo" también detallan los puntos clave de la investigación que inició Anvisa.
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Según el informe, la investigación comenzó con un supuesto "rumor" que llegó desde la coordinación de vigilancia epidemiológica de frontera del aeropuerto de Guarulhos.
Allí, informaron que cuatro futbolistas, cuyos nombres no fueron identificados en ese momento, entraron a Brasil sin cumplir las leyes sanitarias vigentes.
Tras confirmar dicho "rumor", la agencia encuentra el nombre del responsable de la falsificación: "Todas las declaraciones fueron firmadas por una sola persona, el señor Fernando Ariel Batista de la AFA", indica el texto.
Anvisa se puso en contacto con las autoridades sanitarias del estado de San Pablo y después con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) para informar el problema.
La CBF fue notificada por las autoridades sanitarias el sábado a las 10 de la mañana y debían trasladar esa información a los responsables del partido, en este caso, la Conmebol.
Según la Anvisa, la CBF le pasó la información a la Conmebol y también a la delegación del seleccionado argentino.
"El jefe de la delegación de la selección de Argentina y los miembros de la Conmebol y la CBF fueron notificados que los cuatro jugadores en cuestión debían permanecer en sus habitaciones y no podían participar del entrenamiento programado para las 18.30 del sábado en el estadio Arena Corinthians", aseguró la Anvisa en los documentos.
Durante la tarde del sábado, los agentes sanitarios participaron de una reunión junto a representantes de la Conmebol, la CBF y la AFA donde se orientó a los dirigentes argentinos a formalizar un pedido de excepción para los jugadores Emiliano Martínez, Emiliano Buendía, Cristian Romero y Giovani Lo Celso.
Finalmente, ante la supuesta negativa a acceder a los términos que solicitó Anvisa, y que Argentina aseguró que "nunca se contactaron con ellos", se procedió a la intervención en pleno acto deportivo, y se suspendió el encuentro.