El plantel de Gimnasia y Esgrima de Mendoza atraviesa un momento de resurgimiento deportivo y anímico. Tras superar una gran crisis económica y enfrentar inhibiciones impuestas por la FIFA, el equipo dirigido por Fernando Zaniratto ha encontrado un potente motor inspiracional en la imagen del eterno Diez. El Lobo se apoya en la figura de Diego Maradona, venerado como deidad en varios puntos del fútbol, para atraer buenos resultados en esta etapa decisiva del torneo.

El cambio de energía tras el homenaje

El punto de inflexión se sintió a partir del 2 de noviembre, cuando Gimnasia consiguió un triunfo clave ante River Plate en condición de visitante. Esa noche, el equipo presentó una camiseta blanca que lucía el escudo del club, las iniciales “DM” y la firma de Diego Maradona, un detalle preparado para el cumpleaños del astro el 30 de octubre. Tras un primer triunfo ajustado por 1-0 en una noche intensa, el equipo mendocino comenzó a mostrar otra actitud en la cancha.

La racha positiva comenzó con la histórica atajada de Nelson Insfrán, que le permitió al Lobo ganar en el Monumental después de dos décadas. Luego llegó su visita a Vélez Sarsfield, donde profundizó el envión y se impuso 2-0 con goles de Marcelo Torres y Jeremías Merlo, esta vez vistiendo la camiseta alternativa. El impulso se mantuvo en Vicente López, donde derrotó 3-0 a Platense con la casaca titular, sin abandonar la cábala.

Esa serie de triunfos consecutivos le aseguró al conjunto mendocino un lugar entre los ocho mejores de su zona y la clasificación a los playoffs. En Santa Fe, por los octavos de final, la mística del equipo volvió a brillar: Gimnasia superó 2-1 a Unión vistiendo la camiseta suplente azul y dejó en evidencia el clima especial que rodea al plantel. La odisea continuó en cuartos de final en Barracas, con otra victoria como visitante que confirmó la estampa maradoniana.

Desde aquel traspié frente a Estudiantes en la fecha 14 hasta llegar a semifinales de la Liga Profesional, el Lobo transitó un camino similar al de un barco que corrigió el rumbo, fortaleció su tripulación y avanzó con fuerza y determinación hacia un nuevo puerto. Ahora, con el aura de su capitán honorario, Diego Armando Maradona, Gimnasia buscará la hazaña ante Estudiantes y el pase a la gran final.