El actor viene de reencontrarse con Magnolia y Amancio después de 40 días sin verlos.
El intento de Benjamín Vicuña por pasar una tarde tranquila junto a sus hijos menores se convirtió en un momento cargado de tensión.
Una cámara de Puro Show lo encontró en una plaza y el actor, visiblemente incómodo por la situación, terminó reaccionando sin filtros cuando le preguntaron por el explosivo posteo de la China Suárez.
Apenas se acercó al móvil, Vicuña marcó el tono del encuentro: "No es el mejor lugar. Estoy con mis chicos, pero igual vine a hablar así me dejan tranquilo un ratito", dijo, dejando entrever que su paciencia ya estaba al límite.
El actor viene de reencontrarse con Magnolia y Amancio después de 40 días sin verlos, un dato que él mismo resumió con pocas palabras: "Está todo más que bien. Estoy muy contento, feliz. y ya está", expresó con un gesto de agotamiento.
Acto seguido, pidió que el tema dejara de reproducirse en los medios: "Yo iría cerrando el tema. No hay mucho más que hablar".
Cuando el cronista quiso profundizar sobre la reunión con los abogados de su expareja, Vicuña fue aún más contundente: "Son cosas que se resuelven en privado, como tiene que ser. No quiero. no puedo seguir. Es un montón todo lo que se dice y todo lo que se hace", lanzó, dejando en claro su cansancio frente al escándalo mediático que lo viene arrastrando desde hace semanas.
El actor pidió respeto, no solo por él, sino por sus hijos que estaban a pocos metros: "Les pido un poco de respeto. Las cosas se arreglan en familia, con la puerta cerrada", remarcó.
La tensión escaló cuando el periodista le recordó que la China había deslizado en redes que él "llora en público porque es más fuerte que él".
La respuesta de Vicuña fue la más contundente de la tarde: "¡Dale! Siempre cometo el mismo error. Si no hablo, soy un prepotente. Si hablo, también, entiendo tu trabajo, entiendo mi lugar, pero bancame vos también", respondió, firme pero sin perder la calma.
Luego cerró la charla con un límite claro: "Esto ya está. No hay más tema. No hay nada más que decir".