Chile es uno de los países más cerrados para abrir sus fronteras ante el avance de la variante Delta. En el vecino país aún no reciben turismo y toman medidas para retrasar los contagios masivos. 

Sin embargo, desde la embajada argentina en dicho país, consideran que estas decisiones tiene que ver con la llegada de inmigrantes por el norte de Chile de manera informal. 

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"Chile tiene un problema en el norte, que es un problema de fronteras. Hubo una marcha ciudadana y algunos grupos humanitarios destruyeron viviendas precarias que tenían inmigrantes que entran de manera irregular. Esto es un negocio. Hay cogotes donde ésta gente los trae, les cobran plata y después están sin dinero", destacó el embajador de Argentina en Chile, Rafael Bielsa en Aurora 91.3. 

Por otro lado, comentó que el alcalde del lugar donde se realizaron las manifestaciones culpó al Gobierno Nacional por no construir refugios para las personas indocumentadas, que generalmente llegan desde Venezuela y Colombia, según informa. 

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"Muchas veces en esa migración entra el virus, entonces Chile trata de cuidarse todo lo que puede. Dentro de un cuadro general favorable, donde bajan los fallecimientos y la ocupación de camas UTI, los casos de Delta han aumentado en una proporción mayor de lo que informan en Argentina", finalizó. 

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