El mandatario se reunió con familiares de las víctimas en Kerrville.
El presidente estadounidense, Donald Trump, expresó este viernes la "angustia de toda nuestra nación" después de que junto a la primera dama Melania Trump se reunieron con familias de las víctimas de las catastróficas inundaciones de la semana pasada en el centro de Texas, que dejaron al menos 121 muertos y unas 170 personas desaparecidas.
El mandatario y la primera dama inspeccionaron la devastación en Kerrville, y se reunieron con personal de emergencias, funcionarios locales y sobrevivientes. El número de muertos en el estado asciende a 121, pero es probable que la cifra aumente a medida que los rescatistas y las familias continúan la búsqueda de los desaparecidos.
"Acabamos de visitar a familias increíbles que, bueno, miren, están devastadas", dijo Trump en una mesa redonda con funcionarios estatales, federales y locales en Kerrville.
"Perdieron a su hijo, o a sus dos hijos. Es difícil de creer. Nunca había visto algo así: un riachuelo angosto que se convierte en un monstruo, y eso fue lo que pasó. Pero la primera dama y yo estamos aquí en Texas para expresar el amor, el apoyo y la angustia de toda nuestra nación tras esta inundación tan terrible y mortal", dijo Trump citado por CBS News.
Trump se reunió con las familias a puerta cerrada, lejos de las cámaras.
Los Trump, junto con el gobernador Greg Abbott, saludaron a los socorristas con un camión de bomberos de Kerrville y una pila de árboles talados como telón de fondo antes de la mesa redonda, y recibieron una actualización sobre la respuesta a las inundaciones.
Más de 170 personas siguen desaparecidas tras las inundaciones repentinas que asolaron la región la madrugada del 4 de julio. Drones, equipos de rescate y voluntarios revisan los escombros con la esperanza de encontrar respuestas para las familias de los desaparecidos. La mayoría de las muertes confirmadas se produjeron en el condado de Kerr, donde los Trump estuvieron de visita.
"Estamos llenos de dolor y devastación por la pérdida de vidas. Y, lamentablemente, siguen buscando. Siguen buscando. Hay muchos niños desaparecidos", dijo el mandatario estadounidense.
En Camp Mystic, un campamento de verano para niñas con cabañas junto al río en una zona rural del condado de Kerr, cerca de Hunt, al menos 27 campistas y monitoras murieron en lo que fue descripto como una "inundación catastrófica". Algunas sobrevivientes dijeron que se despertaron con el agua entrando a raudales por las ventanas.
"Nunca se puede decir: 'Va a ser más grande, mejor, más fuerte"", dijo Trump. "Se han perdido tantas vidas, no se puede decir eso. Pero vamos a salir adelante. Vamos a recuperarnos. Vamos a recuperarnos. Y vamos a hacerlo bien otra vez".