La provincia de Mendoza recibió una nueva carga de medicamentos esenciales importados desde la India. Se trata de Tacrolimus, un fármaco clave para pacientes trasplantados, cuya adquisición permitirá garantizar la provisión en el sistema público de salud durante aproximadamente 18 meses.

El anuncio fue realizado por el gobernador Alfredo Cornejo a través de sus redes sociales, donde destacó el importante ahorro económico que implicó la operación. Según informó, la compra permitió reducir el gasto en más de $1.500 millones, lo que equivale a pagar cerca de un 92% menos de lo que hubiera costado adquirir la misma medicación por otras vías tradicionales.

En total, la partida incluye 275.000 unidades de Tacrolimus de 1 miligramo y 21.000 unidades de Tacrolimus de 5 miligramos, una cantidad suficiente para cubrir la demanda de los pacientes trasplantados que dependen del sistema público de salud provincial.

"Garantizar la provisión de este medicamento no es un gasto: es una decisión política en defensa del derecho a la salud", expresó Cornejo al dar a conocer la llegada del fármaco, al que calificó como indispensable para prevenir el rechazo de órganos y tratar patologías de alta complejidad.

La compra se realizó a través del Fondo Estratégico de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), un mecanismo que permite a los Estados acceder a medicamentos esenciales a precios significativamente más bajos. El Tacrolimus adquirido proviene de la India, país que se ha convertido en un proveedor estratégico de medicamentos genéricos de calidad a nivel mundial.

Esta entrega se suma a otra realizada a mediados de noviembre, cuando la Provincia incorporó casi 200.000 unidades de micofenolato de mofetilo 500 mg, otro inmunosupresor fundamental para prevenir el rechazo en pacientes con trasplantes de órganos sólidos como riñón, corazón o hígado.

En etapas anteriores, Mendoza ya había avanzado en la importación de medicamentos esenciales desde la India, entre ellos metformina, losartán, levotiroxina e ibuprofeno, como parte de una política sanitaria orientada a garantizar el acceso a tratamientos esenciales y optimizar el uso de los recursos públicos.