El Heat se puso 2 a 0 en la serie semifinal del este ante Milwaukee. Houston Rockets avanzó en el oeste y se medirá con Los Angeles Lakers.
Miami Heat se colocó 2 a 0 en la serie semifinal de la Conferencia Este ante Milwaukee Bucks. Se llevó la victoria 116 a 114 gracias a dos lanzamientos libres de Jimmy Butler.
Jimmy Butler solo marcó 3-8 en tiros de campo y culminó con 13 unidades. Pero sin dudas que esos simples le dieron a Miami una victoria de oro en sus aspiraciones de retornar a las Finales de Conferencia.
Goran Dragic rindió como titular en la victoria con un total de 23 puntos, cinco rebotes, cuatro asistencias y dos recuperos para ser el mejor jugador en las estadísticas individuales.
Tyler Herro y Jae Crowder culminaron la noche con 17 y 16 puntos, respectivamente, para ser dos armas claves en el triunfo.
Milwaukee tuvo a Giannis Antetokounmpo como su mejor jugador de la cancha pero no deslumbró como suele hacerlo. Llegó a 29 tantos y 14 rebotes con 10-18 en tiros de campo.
Un poco más atrás quedo el alero titular, Khris Middleton, quien cerró su planilla con 23 puntos, ocho pases gol y seis rebotes. También dieron la nota Brook Lopez y Eric Bledose con 16 unidades y siete recobres cada uno.
Houston Rockets se hizo acreedor del último puesto en semifinales de la Conferencia Oeste al batir 104-102 a Oklahoma City Thunder en el séptimo juego de la primera ronda de los Playoffs.
Robert Covington acabó el último partido de la serie con 21 puntos (6-11 en triples) y 10 rebotes para ser uno de los goleadores. El otro jugador que tuvo una gran intervención fue P.J. Tucker, quien marcó su segundo gol de campo con la flotadora que le devolvió la ventaja a Houston en los instantes finales.
Eric Gordon fue goleador con Covington con 21 unidades, un fenomenal 5-9 en triples y una serie de defensas muy importantes en el cierre del partido sobre Chris Paul y Shai Gilgeous-Alexander.
El partido de James Harden en la ofensiva no tuvo su mejor día. Apenas ayudó con 17 tantos (3-6 en dobles y 1-9 en triples) y nueve asistencias. No obstante, sus últimas dos tapas en el cierre, sobre todo la hecha a Dort, le dio un valor importante dentro del equipo.
Chris Paul se llevó de recuerdo un récord. Sus 19 puntos, 12 asistencias y 11 rebotes le validaron un triple-doble. Pero no fue uno más. Se convirtió en el jugador más longevo en la historia de la NBA en lograrlo en un juego 7 de Playoffs a sus 35 años. Atrás quedaron las marcas de LeBron James con 31 años y del mítico Jerry West con 30.
Luguentz Dort jugó el partido de su vida. En una temporada inolvidable para el novato, que pasó de no ser drafteado a tener una oportunidad en el Thunder y a quedarse con uno de los puestos titulares. Registró 30 puntos con 6-12 en triples (50%).