Se trata de la estudiante de 3° año de Enfermería Profesional, que este martes 13 de julio fue filmada mientras aplicaba una dosis de vacuna contra el COVID, pero que en realidad no tenía nada más que aire.
La enfermera que fue filmada este martes 13 de julio en el vacunatorio de Parque Benegas mientras administraba una vacuna con una jeringa vacía hizo su descargo en la jornada del jueves. Allí, en una extensa nota a la que tuvo acceso ADN País, la mujer explica que por cierta complicación con sus anteojos decidió quitárselos, por lo que no pudo ver que la dosis era inexistente.
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La profesional explicó así la situación: "El barbijo que usaba hacía que se me empañaran y resbalaran los anteojos, lo que me dificultaba la visión". Fue entonces que cambió de tapabocas, con el mismo resultado negativo. Incluso sus compañeras, siempre según su versión, intentaron colocar una cinta adhesiva para evitar las molestias, pero nada sirvió.
La gran demanda de candidatos a vacunarse hizo que la mujer tomara la decisión de quitarse los lentes: "Fue una mala elección. Pero quería continuar mi tarea de esa forma, confiando en mí y en mis compañeros de trabajo, dado que muchas veces nos repartimos las tareas".
Fotograma del video que muestra a la enfermera aplicando una jeringa vacía: "Nunca lo noté".
"No estoy responsabilizando a nadie, y entiendo que soy la única culpable" sigue escribiendo la enfermera. "Incluso di por hecho que mi labor había sido satisfactoria al final de la jornada", decía en otra parte de su descargo.
Esta situación, además de haberse viralizado, llegó a conocimiento del director del Instituto donde la mujer estudia Enfermería: "Cuando me mostraron la filmación, usted mismo (refiriéndose al director) notó que yo no tenía anteojos, y yo misma lo admití. Fui yo también quien aceptó que la jeringa estaba vacía.".
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Ante este detalle, la mujer enfatizó: "Mi acción fue involuntaria, ya que incluso permití que grabaran mi accionar. Quiero añadir a mi defensa que de haberlo notado hubiese tomado la decisión de dar aviso a algún responsable a cargo .
La carta finaliza con un profundo pedido de disculpas al paciente, al director del lugar donde ella estudia, a la Estación Benegas, a sus compañeros, y al público en general.