El máximo tribunal provincial definió su nueva cúpula directiva para los próximos dos años.
El actual presidente de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza, Dalmiro Garay, accedió este martes a su tercera reelección consecutiva al frente del máximo organismo judicial. La decisión se tomó en el habitual encuentro de los siete magistrados que componen el Tribunal, asegurando la continuidad de Garay en el cargo para los próximos dos años, periodo en el que se desempeñará en la Sala Administrativa.
La votación interna se resolvió con un claro 5 a 2 a favor de la postulación de Garay. Quienes acompañaron su continuidad fueron los jueces María Teresa Day, Norma Llatser, Omar Palermo, Julio Gómez y el propio Garay. En disidencia se manifestaron los magistrados Mario Adaro y José Valerio, quienes se opusieron a esta renovación de mandato.
Además de la Presidencia, el cuerpo también designó a los vicepresidentes primero y segundo. Los cargos recayeron en Omar Palermo y Julio Gómez, respectivamente, quienes también recibieron la misma composición de votos (5 a 2) que la elección de Garay, con el rechazo de Adaro y Valerio en ambos casos.
La importancia de esta votación radica en que los tres cargos elegidos –presidente, vicepresidente 1º y vicepresidente 2º– componen la Sala Administrativa de la Corte. Estos mandatos, que vencían el jueves 27 de noviembre, son asumidos por un período de dos años, tal como sucedió en la conformación de 2023.
Cabe recordar que la Ley establece un quórum elevado para la elección de presidente. En una primera y segunda vuelta se requiere el apoyo de al menos 5 de los 7 ministros, lo que equivale a los dos tercios del Tribunal, tal como lo estipula el Artículo 5° de la normativa.
La votación de hoy cumplió con este requisito de mayoría calificada, consolidando el apoyo de cinco magistrados. En caso de no haberse alcanzado esta cifra, la ley prevé una tercera votación donde bastaría la mayoría simple para definir al presidente.