La víctima sufrió la amputación de ambas piernas y permanece en terapia intensiva.
La justicia mendocina imputó por "homicidio simple en grado de tentativa" a Lucas Mariano Tello, el hombre de 31 años que atropelló y arrastró durante tres cuadras a un joven en Guaymallén. El violento episodio ocurrió el viernes por la noche, presuntamente como una represalia ante un intento de robo en una plaza de la zona. Mientras Tello permanece detenido por orden de la fiscal de Homicidios Florencia Díaz Peralta, la víctima, identificada como Nicolás Alejandro Varas Frías, lucha por su vida en el Hospital Central.
El parte médico del hospital capitalino confirmó la gravedad extrema del cuadro de Varas Frías. El joven ingresó con politraumatismos severos y sufrió una "amputación traumática" de sus miembros inferiores producto del arrastre bajo el vehículo. Tras ser estabilizado, los profesionales debieron realizarle una amputación supracondílea bilateral en el quirófano. Actualmente se encuentra intubado en terapia intensiva con pronóstico reservado, mientras su familia espera una evolución favorable dentro de la criticidad del caso.
En paralelo, el Ministerio Público Fiscal lleva adelante dos expedientes. Por un lado, la acusación contra Tello por el ataque con el auto; por el otro, el fiscal de Robos y Hurtos, José García Mango, investiga el presunto asalto que habría desencadenado la persecución. No obstante, las autoridades aclararon que el supuesto robo todavía no está acreditado judicialmente, por lo que se esperan los resultados de las cámaras de seguridad para verificar la versión de los imputados.
La reconstrucción de los hechos, basada en el acta policial y el testimonio de la novia del conductor, indica que tras una riña en la plaza de Villanueva, Tello comenzó a perseguir a los supuestos ladrones en su VW Gol gris. Al alcanzar a uno de ellos en la intersección de Godoy Cruz y Alpatacal, lo embistió de tal forma que el cuerpo quedó incrustado en la parte baja del rodado. El conductor continuó la marcha durante tres cuadras hasta que un grupo de vecinos lo obligó a detenerse ante la macabra escena.
Un dato que no pasó desapercibido para los investigadores es el frondoso prontuario de ambos protagonistas. El conductor detenido cuenta con antecedentes por robo agravado con uso de arma de fuego, amenazas en contexto de violencia de género e infracción a la ley de drogas. Por su parte, el joven herido también presentaba una medida pendiente por tentativa de homicidio datada en enero de 2025, lo que añade complejidad al contexto social del enfrentamiento.
Tello se entregó voluntariamente dos horas después del hecho en una dependencia policial, alegando que huyó inicialmente por miedo a represalias de los testigos. El vehículo fue secuestrado para realizar las pericias correspondientes que determinen la mecánica exacta del impacto. La justicia deberá determinar ahora si la acción del conductor fue una reacción desmedida bajo emoción violenta o un acto deliberado de venganza que terminó en tragedia.