El fin de semana extralargo por el Día de la Soberanía Nacional impulsó un movimiento turístico masivo, generando extensas filas y tiempos de espera de hasta una hora y media en el complejo Horcones, del lado argentino.
El feriado extralargo por el Día de la Soberanía Nacional culminó con un regreso a casa cargado de paciencia para miles de mendocinos y argentinos que cruzaron a Chile. El Paso Internacional Cristo Redentor registró este lunes por la tarde demoras significativas, transformando el último tramo del viaje en una prueba de espera para quienes buscaban reingresar al país.
Las complicaciones se concentraron específicamente en el complejo Roque Carranza - Horcones, ubicado en el lado argentino. Allí, el tiempo de espera para realizar los trámites migratorios y aduaneros se prolongó notablemente, oscilando entre los 60 y 90 minutos, según el momento de la tarde. Gendarmería Nacional se encuentra al frente de los operativos de control, gestionando la situación.
En un marcado contraste, la situación fue notablemente más ágil al otro lado de la Cordillera. En el complejo Los Libertadores, en territorio chileno, el cruce hacia Argentina se desarrolló con mayor fluidez, con solo alrededor de 10 minutos de espera reportados por los viajeros.
Las autoridades confirmaron que el flujo de vehículos que baja de Alta Montaña rumbo al llano mendocino fue hasta cuatro veces mayor a lo que se considera habitual para un lunes. Esta intensificación del tránsito se hizo aún más notoria durante el transcurso de la tarde, coincidiendo con la hora pico de retorno.
El buen clima que acompañó el fin de semana extralargo, sumado a las buenas condiciones de transitabilidad del paso fronterizo, impulsaron a miles de viajeros a cruzar la cordillera. Este alto movimiento turístico, tanto interno como internacional, terminó generando el cuello de botella en el control migratorio.
La paciencia fue, entonces, el requisito principal para los turistas que, tras disfrutar de la escapada extendida, se encontraron con una hora y media de espera para volver a pisar suelo argentino, cerrando así un fin de semana de alta demanda en la ruta internacional.